El consejero de Vivienda y Urbanismo, Alejandro Gil, en su calidad de presidente del Patronato de las Tablas de Daimiel (Ciudad Real), asistió hoy a la reunión de este órgano, donde destacó la unanimidad de todo el Patronato en sus alegaciones al Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG).
Uno de los asuntos habituales que forma parte del orden del día de los Plenos del Patronato, y que también ha sido abordado hoy, es el concerniente a la evolución del parque en los últimos meses, que sólo cuenta con 18 hectáreas encharcadas de las 1.800 que podrían estarlo, por lo Gil calificó como crítico el momento por el que atraviesa este Parque Nacional, en el que además las aves están en plena nidificación y comenzando la alimentación de sus crías.
Gil lamentó que este año las Tablas de Daimiel no hayan contado con aportaciones de agua provenientes de trasvases, reconociendo que la cabecera del Tajo tampoco se encuentra en un momento idóneo para ello. Aún así, el Pleno del Patronato ha descartado la petición de agua puesto que el momento climatológico propiciaría la pérdida del agua por filtraciones al acuífero, antes de que ésta llegase a la superficie del Parque, informó la Junta.
El Pleno celebrado ayer también contemplaba en el orden del día las alegaciones que el Patronato va a presentar al Plan Especial del Alto Guadiana, elaborado por el Ministerio de Medio Ambiente, y que están encaminadas a resolver los problemas estructurales del Parque, pudiéndose producir así un retorno a su estado original.
Alejandro Gil calificó como muy positiva la adquisición, por parte del Ministerio de Medio Ambiente, de noventa y cinco hectáreas en el entorno de las Tablas, y ha indicado que el Pleno exigirá a dicho Ministerio que continúe con ese tipo de actuaciones, llevándolas a cabo en dos fases.
La primera consistiría en la adquisición de más terreno, así como de los correspondientes derechos de agua, en una corona de aproximadamente dos o tres kilómetros alrededor de Las Tablas, para posteriormente hacer lo propio en una segunda fase, alcanzando los cinco kilómetros de distancia, y consiguiendo así que se extraiga menos agua en el entorno del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, y se reforesten estos terrenos con vegetación autóctona, para lograr que este espacio recupere su estado original.
También se solicitará al Ministerio que dirige Cristina Narbona que se extreme la vigilancia, tanto en lo concerniente a las extracciones ilegales del acuífero 23, como las derivaciones que se producen en el transcurso del trasvase hacia determinadas lagunas, y que se lleve a cabo una mejora en la calidad de los afluentes que vierten a Las Tablas, a través de la depuración de aguas residuales de los municipios del entorno.
Igualmente, se considera necesario recuperar el dominio público hidráulico en los ríos y arroyos del entorno del Parque, así como las llanuras de inundación de los mismos.
Otras cuestiones abordadas en la reunión del Pleno del Patronato, han sido la solicitud de elaboración de un estudio al Ministerio de Medio Ambiente, para que el agua que se trasvasa al parque, y que llega a éste a través del cauce del río Gigüela, no se pierda en el mismo sino que pueda ser aprovechada en su integridad, y la puesta en marcha de un programa de educación ambiental.
Europa Press - El Día de Ciudad Real
